A partir de las 0 horas del 26 de Junio, en la madrugada del viernes al sábado, dejará de ser obligatorio el uso de la mascarilla en espacios abiertos. Esto no significa que podamos tirar los "bozales" a la basura pero sí que podremos llevarlos en el bolsillo o en el bolso cuando no estemos en un lugar cerrado con más personas que no sean convivientes nuestros o en exteriores sin la suficiente distancia de seguridad. En la hostelería se mantiene la obligatoriedad excepto en los momentos en los que las personas consuman la comida o bebida. En el transporte público será imprescindible la mascarilla, mientras que en los privados se mantiene la obligatoriedad si los viajeros no son convivientes. Las mascarillas se seguirán usando al entrar en locales cerrados tales como comercios, galerías o vestuarios. Siguen siendo obligatorias en reuniones sociales en interiores así como las que se celebren en domicilios en los que las personas no son convivientes. Al practicar deporte individual no hay que llevarla pero seguirá siendo necesaria si no se puede mantener la distancia de seguridad.
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