Uno o varios imbéciles, no sabemos si oriundos o foráneos, destrozaron hace unos días el cepillo para limosnas que se encuentra debajo de la figura del San José que se encuentra en una calle de nuestro pueblo, llevándose el mucho o poco dinero que había y que servía para el mantenimiento del santo, como dice Carmen Velasco en una publicación de facebook: "Yo y mi vecina Carmen Isabel Márquez nos encargamos de manera altruista de limpiar y mantener limpio el santo y el dinero que le echa la gente del pueblo se destina a pintura, flores y a obra. Se arreglo la luz, se le puso por dentro, que lo hizo Miguel y la luz Francisco (ico) . Ahora dices como hay gente tan mala, ojalá el que se lo ha llevado se lo gaste en pastillas para el dolor de cabeza." Hay que preguntarse si le puede doler la cabeza a alguien que, aparte de ser un ladrón, tiene tan pocas neuronas.
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